A Candy colored clown

In Dreams - Roy OrbisonAcuff Rose and Opryland Music (BMI)Copyright 1963 Monument Record Corp. A candy colored clown they call the sandman/Tiptoes to my room everynight/Just to sprinkle stardust and to whisper/Go to sleep, everything is alright/I close my eyes then I drift away/Into the magic night I softly say/A silent prayer like dreamers do/Then I fall asleep to dream/My dreams of you/ In dreams I walk with you/In dreams I talk with you/In dreams you're mine/All of the time with you/Ever in dreams, in dreams/ But just before the dawn/I awake and find you're gone/I can't help it, I can't help it if I cry/I remember that you said goodbye/It's too bad that all these things/Can only happen in my dreams/Only in dreams/In beautiful dreams.

sábado, 10 de noviembre de 2007

Otro 'remake'


Es notable la manía que tienen los distribuidores -al menos en México y España, que no se queda atrás- por ponerles nombres (chaqueteros) a las películas extranjeras. Si bien sí hay una Exorcist: The Beginning así como una The Texas Chaisaw Massacre: The Beginning, las cuales fueron éxhibidas con respectivos sus títulos traducidos literalmente: ....el comienzo; mención aparte merece Halloween: el inicio. Mientras que las dos primeras son precuelas, esta última: no, pero los de Videocine -que al menos recuerdo distribuyeron la de El Exorcista... y, también Batman Begins (Batman inicia)- deben haber considerado "pertinente" el señalar que íbamos a conocer a un Michael Myers niño, es decir, como la precuela -no oficial-. Siendo que el título original es simplemente Halloween, y se trata del refrito/homenaje al clásico de Jonh Carpenter, filmado en 1978.



Luego del largo choro, quiero decir que comparto la opinión de quien escribió en Variety que Rob Zombie había hecho suyo el clásico slasher-film, lo cual es bastante acertado. El también músico se ha destacado como un realizador que no deja de hacer referencias a las películas de serie B de los gloriosos setentas y ochentas, como en su díptico integrado por La casa de los mil cuerpos y Violencia diabólica; además del falso avance Werewolf Women of the S.S. -aún sin proyectarse en México -que forma parte del proyecto Grindhouse, de la mancuerna Rodíguez/Tarantino. Asimismo, Zombie se ha venido desprendiendo un tanto de su inicial (aquí sí aplica) estilo videoclipero de su ópera prima. En suma, sin los cameos y la estética a la que rinde homenaje, sus cintas serían otra cosa.


Es así como, a pesar de que no es el inicio, el director ha dotado a Halloween de un prólogo más extenso y, distinto, del que plantearon Carpenter y su co-gionista y productora Debra Hill. Michael el niño, nada dulce como el setentero, vive en dicha década y no antes. Su psicología de asesino por naturaleza brota -como es el típico caso clínico- tras torturar y matar animales, hasta que explota contra un compañero de escuela (un bully cualquiera) y, más adelante -como anticipamos-, ejecuta a su sister (indiferente y cogelona), y -aportación del cineasta- a su padrastro jodón. Además, el Dóctor Loomis, interpretado por Malcom Mc Dowell (aka Alexander De Large en Naranja mecánica), aparece ante nosotros desde los años escolares del "engendro infernal", cuya madre, encarnada por Sheri Moon Zombie -esposa y actriz fetiche-, quien es la única persona que muestra algún afecto por el púber, se quita la vida, dejando desamparada a su bebé -pieza clave para el desarrollo de Michael como personaje-.



El resto es una reconstrucción más o menos similar de los hechos que Carpenter filmó así como de los que no incluyó -por falta de presupuesto, interés, etc.-; y, sin embargo, Zombie ha logrado darle más vida al inanimado apuñalador de baby sitters, sus novios precoces (ya se imaginarán porque el adjetivo) y de quien se le ponga enfrente, durante los años noventa. Asimismo, hay una conjunción de las dos primeras versiones de Halloween, y claro el último cuarto del filme se torna aún más predecible; pero está pasable. No podían faltar los cameos de las estrellas serie B -y buenas actrices- de clásicos como The Hills Have Eyes o Aullido 2, así como de la cuadra artística de Rob -y la actuación especial del ya ícono chicano Danny Trejo. En fin, apenas me enteré que también se está proyectando en IMAX, aunque no veo que gran diferencia pueda aportarle dicho fromato a los frenéticos cortes de edición o a la fotografía a grano reventado -quizá adulterado en posproducción-. Lo que sí es que, con todo respeto para el fallecido productor de la saga -y su hijo, mismo caso-, deseo que ya entierren a Myers. Los tiempos cambian y los arquetipos igual.


Nota: chingón el homenaje -por partida doble- al incluir la rola "Don't Fear The Reaper", una de las favoritas de Carpenter, mías y, supongo que, de Zombie.

miércoles, 7 de noviembre de 2007

Alice Cooper - Welcome to my Nightmare




Ya pasó la semana de Halloween, pero como no tuve Internet, pues aquí va. Mi homenaje a quien antes de Marilyn Manson -que me cae muy bien- comenzara con su rollo satánico. Alice Cooper, cuyo nombre artístico se dice fue tomado del de una famosa bruja de allá del gabacho, incursionaba -como solista- a mediados de los setentas en la escena del Rock. Sus temas oscuros y sus magníficos videos hablan por sí mismos; aunque como plus en éste hay un cameo del magnífico Vincent Price, en el rol de "The Spirit of the Nightmare".